sábado, 24 de diciembre de 2011

UN LECTOR OCASIONAL


Hay detalles en la vida actual que irradian desconfianza, sin menoscabo de que el problema económico repercuta de forma notoria en ello, aumentado la problemática actual del recorte en el gasto provocado a las empresas por culpa de la crisis que soporta. No me resulta fácil entender el porqué del cierre de un diario como ADN, integrado en el colectivo de gente a la que cada mañana les sirve de distracción en el transcurso de su trayecto al trabajo, a la universidad o a sus tareas cotidianas.
Excelentes profesionales que se han visto abocados a dejar sus puestos dentro de una redacción involucrada en llevar a los ciudadanos la noticia a la mano. Como dijo Jorge Luis Borges: “La universidad debiera insistirnos en lo antiguo y en lo ajeno. Si insiste en lo propio y lo contemporáneo, la universidad es inútil, porque está ampliando una función que ya cumple la prensa” se deberían de hacer más esfuerzos para que los periódicos que sean asequibles de mantener informada a la gente, tuvieran otras posibilidades de financiación y no dejarlos caer en el ostracismo quedando apartados sin mediar cualquier posible alternativa.
Los razonamientos sacados de la lógica me llevan a opinar aquello de “una imagen vale más que mil palabras”, traduciéndolo al “una palabra vale más que mil imágenes”,  eso es lo que creo que es la prensa escrita. Tendrán que tomar medidas y que el resto de diarios de tirada gratuita, aptos para llevar información a muchos ciudadanos a los cuales les es complicado desprenderse del dinero diario para comprar el periódico se les pueda mantener informado con objetividad, presteza y profesionalidad.

Un saludo a la redacción de ADN.

Juan Antonio Sánchez Campo
Diciembre/2011

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