¡¡UNA POLÍTICA SORDA, CIEGA O INTERESADA!!
Estamos hartos de la casposa
casta política sea del color o ideología que esta refleje y pretenda, estamos
hasta lasnarices de enfrentamientos vulgares con la única, malsana, partidista
y personalista intención de alterar normas o funciones, incapaces de dejar
hacer a quién sabe de enfermedades y reniega de posicionamientos ilógicos, atrapados
por el miedo a caer en el ostracismo futuro de su corta inteligencia, la cruz
del desaire y la desconfianza ya la tienen segura en las próximas elecciones,
ojalá que al menos podamos celebrarlas todas y todos juntos para gritarles a la
cara su despotismo, hedonismo soberbia y descorazonadora muestra de corto
sentido común; que pena haber caido en una pandemia con la casta de unos
representantes públicos en la cúspide política absolutamente incompetentes.
Cuando el criterio científico coja
las riendas de la pandemia y los dirigentes políticos atiendan sus demandas es
posible, tal vez imprescindible, que los rigores de la pandemia desciendan su estadística
de amenaza sanitaria a la ciudadanía. Siempre vamos varios pasos por detrás de
aquello que nos sobrepasa, la culpa dicen que es nuestra en boca de las
administraciones enfrentadas, sin embargo, con toda seguridad, los únicos
culpables son los que tienen el poder de poder cambiar los errores cometidos
hasta ahora por aciertos urgentes. jasc